Víctor Laplace es oriundo de la apacible ciudad de Tandil. Hace unos años, casi en silencio y poniendo más de lo suyo que de otros lugares, comenzó a realizar un festival de cine en su ciudad. Pasó el tiempo y este sábado (hasta el 30/06) comenzará ya la 7ª edición del Tandil Cine.
“El cine sigue siendo un lugar de resistencia. En 1999, hice mi primera película como director y, estando en Tandil, en una nota que me hizo el periodista Julio Varela, terminamos hablando de qué posibilidades había de hacer algo para paliar la mala situación de entonces. Podemos inventar un festival de cine, le dije y él -atrevido periodista y hombre de cine- me dijo ‘hagámoslo’. Ahí nació este Festival, como una manera de resistencia, como una quijotada”, contó Laplace acerca de cómo surgió todo.
“El cine sigue siendo un lugar de resistencia. En 1999, hice mi primera película como director y, estando en Tandil, en una nota que me hizo el periodista Julio Varela, terminamos hablando de qué posibilidades había de hacer algo para paliar la mala situación de entonces. Podemos inventar un festival de cine, le dije y él -atrevido periodista y hombre de cine- me dijo ‘hagámoslo’. Ahí nació este Festival, como una manera de resistencia, como una quijotada”, contó Laplace acerca de cómo surgió todo.
Son estos hechos los que ayudan a mantener “vivo” a un pueblo. Estos “pequeños” hechos, sí. A los que, generalmente, en las grandes ciudades le den (o le demos) una importancia menor. Pero este tipo de eventos pueden hacer movilizar no sólo al pueblo que resulte sede sino a gran cantidad de gente de los alrededores. En definitiva, de este modo, además de sus encantos turísticos naturales, Tandil suma un nuevo atractivo (y durante una semana). Qué lindo sería que hubiese epidemias de buenas ideas.
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