20.6.09

Para quiénes juegan los que nos “informan”

No hay “La recomendada de la semana” explícita esta semana. O sí, porque podría serlo la columna que Martín Caparrós tituló como “Votos Cantados” en Crítica. A eso se referirá este post. En el texto, Caparrós considera que sería saludable que los periodistas políticos deberían hacer saber a quién van a votar: “Para que quienes nos leen o nos escuchan sepan desde dónde les hablamos. Creo que los periodistas y articulistas argentinos abusan de esa idea falsa, imposible, de objetividad o de neutralidad, y que esa falacia les sirve para esconderse de vaya a saber qué”. ¿Morales Solá votará por Michetti? ¿Grondona por De Narváez? ¿Van der Kooy por Giustiniani? ¿Wainfeld y Aiverti por Heller?

Apruebo la iniciativa de Caparrós. Máxime, en un momento en el que los principales medios nacionales apuestan tanto en esta elección. La idea, hecha pública por Martín en su columna publicada el día de mi cumpleaños (3 de junio), poco ha prendido. De los que me he enterado, a raíz de esta columna han hecho público su voto periodistas como Reynaldo Sietecase (vota en Santa Fe: Giustiniani) y Víctor Hugo Morales (como Caparrós, apuesta por Solanas en la Capital Federal).

Similar planteo a Caparrós realizó Horacio Verbitsky en 2007. Cerró su última columna preelectoral diciendo: “El respeto a quien lee aconseja concluir este análisis con la información sobre el voto del autor, actitud que no debería ser excepción sino regla: Filmus-González García”. Si los diarios, canales de televisión, medios en general, adoptaran esta regla (en Europa y en Estados Unidos, antes de que comiencen las campañas electorales los principales medios “blanquean” con una editorial a qué candidato considera más apto), un buen paso estaríamos dando en pos de una mejor calidad periodística y política.

Obvio que no soy uno de los periodistas a los que Caparrós pide que hagan público su voto. Pero me sumo a la iniciativa. Y les cuento que el 28 voy a votar para diputado nacional al candidato de Nuevo Encuentro, Martín Sabbatella. ¿Y vos?

No hay comentarios: